ESA MUJER SABE A VERSO
Esa mujer mete ritmo,
revoluciona paso y camino.
Esa mujer, esa mujer me da miedo.
Tiene en su rostro un faro
que abrasa el rumbo de mis instintos.
Esa mujer, esa mujer me da miedo
Y, sin embargo, me atrae como el silencio
que da a luz todo sonido, triste o contento
Si dice, me habla de cosas que yo no entiendo.
Y, sin embargo, lo dicho, me sabe a verso.
Esa mujer teje un trino
con la madeja de mis abismos.
Esa mujer, esa mujer me da miedo.
Me hace cantar los olvidos,
vendimia sones bien doloridos.
Esa mujer, esa mujer me da miedo.
Y, sin embargo, me atrae como el silencio...
Esa mujer muda el signo
de mis creencias, de mis latidos.
Esa mujer, esa mujer me da miedo.
Me hace rezar en su cuerpo
diez mil caricias y algún gemido.
Esa mujer, esa mujer me da miedo.
Y, sin embargo, me atrae como el silencio...
Esa mujer me hace hombre,
cultiva el bosque de lo que escribo.
Esa mujer, esa mujer me da miedo.
Cuando la abrazo, un viento
de libertad sopla y yo recito.
Esa mujer, esa mujer me da miedo.
Y, sin embargo, me atrae como el silencio...
Antonio Placer. Bergondo
Supe de Antonio Placer a través de dos espléndidas mujeres. Una de ellas, Asun Lastra, me presentó, en una fiesta que daba en su casa, a la otra mujer que se llamaba Carmen, Carmen Placer. Enseguida se disparó el entusiasmo y la complicidad entre nosotras, hablamos y hablamos de la vida y el amor; de nosotras, las mujeres y de los hombres.
Como la ocasión lo merecía, catamos deliciosos manjares regados con buenos vinos y licores de la tierra. Y con la música brotaron las palabras y leímos poemas.
Asun tenía un ejemplar de Bergondo - con una cariñosa dedicatoria de Antonio - Recuerdo aquella sensación de cercanía que me conmovió, el canto de Antonio Placer era tan hermoso, tan fértil, vibrante, como la vida.
Dice Xavier Seoane,
Antonio Placer tiene un pacto radical con la vida. Sabe que ella es el fundamento verdadero, la instancia última, la razón irrenunciable. Por eso toda su emoción, toda su sed de comunicar, de hacer vibrar, se dirige a nosotros. Su tono apasionado, el despliegue de una viva sensualidad, la táctil plasticidad de su mirada sobre las cosas y las personas, están ahí para interpelarnos. Para enriquecer nuestra experiencia de la vida. porque sabe que nuestra atención está al acecho. Y que la palabra y la música - hermanas siempre gemelas, nacidas misteriosamente juntas- , van a iluminarnos en un pacto que es abrazo, sueño, poesía, danza.
músico, poeta, compositor
SOY UN BERGONDÉS
QUE VA RUMBO A LA SINRAZÓN
A ESCULPIR FUEGO Y AIRE
Querida hermana, esa mujer eres tú? Quien podría saber a verso mejor que vos.
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